Málaga tiene entre sus señas de identidad la de ser una ciudad abierta y hospitalaria, donde el valor de la Tolerancia es un instrumento activo de aprecio a la diversidad y defensa a ultranza de la dignidad de la persona con independencia de su procedencia, origen étnico o distinción cualquiera.
Esto ha de plasmarse en un compromiso activo y unánime en contra del racismo y de cualquier manifestación de intolerancia por parte de instituciones públicas y sociedad civil. Por eso, un año más conmemoramos el Día Internacional para la Eliminación de toda forma de Discriminación Racial.
Hace ahora 52 años, la policía sudafricana disolvía a tiros una manifestación ciudadana que reclamaba acabar con las leyes del apartheid que discriminaban y oprimían al 90% de la población negra en su propio país. La determinación de Nelson Mandela y de todo el Congreso Nacional Africano, junto con la solidaridad internacional logró demoler los cimientos de aquel régimen racista. La capacidad para conciliar memoria, justicia, reconciliación, unidad y concordia es sin duda la gran fuente de inspiración que nos ofrece el legado moral y político de Mandela, y que hoy hacemos nuestro.
Nuestra ciudad afronta los rigores de la peor crisis económica desde la gran depresión. Lo que afecta a miles de personas, que ven como sus esperanzas de prosperidad y bienestar se ven cercenados por lacras como el desempleo y la falta de expectativas. La historia nos demuestra que en estas circunstancias donde anidan la ansiedad y el miedo, emergen pulsiones populistas que pretenden rentabilizar ilícitamente la angustia social para promover el racismo y la xenofobia. Nuestro rechazo no se concreta en una mera declaración de intenciones, es parte esencial del compromiso del Ayuntamiento con los Derechos Fundamentales del Ser Humano y por tanto, principio de inspiración de todas nuestras políticas.
Queremos reiterar, por tanto, algunos de las posiciones que hemos venido teniendo en relación con la lucha contra el racismo y la intolerancia. La diversidad de la gente de la ciudad, es un factor que la hace más atractiva y próspera. La presencia de inmigrantes contribuyó al desarrollo económico y a la prosperidad del país, y ahora vamos a contar con ellos para salir de la crisis porque los consideramos ya parte esencial de nosotros mismos. Por eso insistimos en la necesidad de avanzar en el reconocimiento pleno de todos sus derechos en general, y particularmente, el de su plena capacidad de participación política.
Expresamos nuestra solidaridad con las personas internadas en el Centro de Internamiento de Extranjeros y queremos contribuir desde nuestras competencias y posibilidades a que se respete su dignidad y sus derechos humanos; por eso, proponemos que una comisión compuesta por integrantes de los grupos municipales y ONG´s especializadas, verifique el estado en que se encuentran los seres humanos allí internados.
Es momento de recordar también al Pueblo Gitano, y renovar un compromiso firme en contra del racismo y la discriminación que todavía sufre. Centenares de años de convivencia no han sido suficientes para lograr el pleno reconocimiento de sus derechos fundamentales.
Creemos que una Málaga en la que ninguno de sus habitantes se sienta segregado, se asemejará más a la Málaga que desea su gente. La historia del pueblo gitano debe ser rememorada e identificada como nuestra y el prejuicio en su contra desterrado.
En el marco de nuestras competencias nos comprometemos a colaborar con instituciones públicas y ONG´s para promover un modelo educativo que niegue espacio al racismo y a la intolerancia, y promueva un modelo de sociedad intercultural basada en principios de tolerancia y la defensa de los derechos humanos.
En el marco de nuestras políticas de igualdad prestaremos especial atención a los problemas de doble discriminación que puedan sufrir mujeres inmigrantes y gitanas.
Desde el Ayuntamiento nos proponemos poner en marcha medidas de buenas prácticas de gestión de la diversidad por parte de la Policía Local, evitando identificaciones basadas en el llamado “perfil étnico”, mejorando la formación de los agentes en la prevención y detección de delitos e incidentes de odio, mediante la creación de protocolos específicos de actuación en esos casos, y estableciendo líneas de contacto con la Fiscalía especializada en la materia recientemente creada en la provincia de Málaga.
Igualmente, el Ayuntamiento de Málaga y las entidades sociales de la ciudad expresan su preocupación por la proliferación de organizaciones neonazis que operan en la ciudad desde hace años, difundiendo mensajes que incitan al odio y a la violencia contra inmigrantes y otros colectivos vulnerables. La relación entre el discurso del odio y la violencia es un hecho indiscutible, tanto a través de Internet como de actos públicos abiertos. Recientemente, se han producido agresiones contra inmigrantes de diversa procedencia que no han recibido la atención y asesoramiento jurídico y apoyo psicológico adecuados. Consideramos esencial que se cubra ese servicio por parte de las organizaciones especializadas para erradicar un vacío que incrementa el dolor de las víctimas.
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