jueves, 5 de enero de 2012

Sin notificación oficial del encuentro de ultra derecha

Preocupación ante posibles altercados en Sevilla por la llegada del dirigente fascista italiano Gianluca Iannone.

La delegación del Gobierno no ha recibido por el momento solicitud alguna para la celebración el próximo 28 de enero de un encuentro de fascistas y extrema derecha de Europa, del que se ha tenido constancia a través de diferentes páginas web y en las que se llega a publicar un cartel del acto previsto en Sevilla. La fecha límite para que la Delegación dé o no su visto bueno es el 18 de enero, diez días antes de la celebración de unas jornadas a las que acudirá el líder ultraderechista italiano Gianluca Iannone.
Con la intención de que el Ayuntamiento hispalense evite la llegada de estos grupos y la celebración del encuentro, en el que se temen actos violentos, el PSOE envió una carta a Juan Ignacio Zoido el 29 de diciembre. Un rechazo que el alcalde ya hizo llegar la pasada semana vía Twitter. El Movimiento contra la Intolerancia, por su parte, pone el acento en que se investiguen a los medios de comunicación que alientan este tipo de acontecimientos -sobre todo a través de Internet- y deja claro que «no es bueno para la ciudad» acoger estos encuentros.
Gianluca Iannone, nacido en agosto de 1974, es un dirigente social fascista y cantante italiano, líder de la organización Casa Pound y uno de los mayores referentes de la destra. Sus inicios en la política se remontan a los 14 años, cuando se afilió a la sección de Acca Larenzia del Fronte della Gioventù del Movimiento Social Italiano. En los años siguientes realizó una militancia imparable de la cual surgió la destra, derecha social italiana. El 27 de diciembre de 2003 funda Casa Pound –con más de 5.000 socios en Italia y sedes por todo el país alpino–, de la cual nace a su vez el Blocco Studentesco, ala estudiantil y universitaria de la derecha italiana. Iannone, adenás, es vocalista del grupo musical Zeta Zero Alfa, que tiene previsto actuar el 28 de enero en Sevilla, aunque en el cartel que se difunde por Internet no se fija ni la hora ni el escenario elegido.
Los organizadores dicen «identificarse» con este grupo y aseguran que el acto será «libre, pacífico y privado», «ni racista, ni violento, ni homófobo» como «pretenden hacer ver», aseguran.

La Razón - 4/01/12

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